Tipos de Poder según Max Weber

Según Weber existen tres tipos de dominación legítima, todas realizadas mediante tres tipos de poder correspondientes:

Poder tradicional: Un ejemplo sería el Antiguo Régimen ya que se rige por normas tradicionales, no es racional y el poder se transmite por herencia. Quién ejerce el poder lo legitima por el hecho de la creencia en el pasado eterno y la tradición.

Un aspecto positivo de este tipo de poder es que el cambio de poderes se produce de manera automática e inequívoca, por lo que es difícil que se den conflictos en la sucesión. Otro aspecto positivo es que la tradición otorga a los elementos pasivos que se ven influidos por esta de unas arraigadas costumbres que hacen que se sometan fácilmente a este poder.

Los aspectos negativos son la falta de libertad de oportunidades entre los individuos dominados, desigualdades en los derechos y que los individuos están sujetos a la voluntad del monarca.

Poder carismático: Este poder lo ejerce un personaje que por sus características personales tiene un gran poder de seducción y atrae a los subordinados bajo su influencia debido a la devoción afectiva que sienten éstos hacia el que ejerce el poder. Un ejemplo serían personajes como Martin Luther King o Hitler.

Un aspecto positivo de este poder es la facilidad de dominación por el que ejerce el poder, ya que se establece un vínculo no racional entre dominador y dominado.

Los aspectos negativos son, como es un poder sin base racional, es muy inestable y puede adquirir características revolucionarias. También es muy peligroso porque produce una situación de división entre los partidarios del líder y los no partidarios, mostrando un fuerte rechazo hacia el que ejerce el poder por parte de estos últimos.

Poder racional-legal: Este poder se da cuando los subordinados aceptan las órdenes de los superiores, porque están de acuerdo con un conjunto de normas que consideran legítimas y de las cuáles se deriva el poder de mando. El gobernante es elegido y ejerce la autoridad en base a un conjunto de normas y leyes. Un claro ejemplo es el Estado moderno.

Los aspectos positivos son, que es un poder de fácil legitimización ya que se basa en normas legales racionalmente definidas, por lo que es bastante estable y no se suelen producir situaciones de conflictos graves.

Un aspecto negativo es que este tipo de poder produce una deshumanización de las relaciones interpersonales, debido a que la racionalidad no deja sitio a los vínculos afectivos. Otro aspecto negativo es la dificultad de quien determina la legitimidad del régimen y el conjunto de normas por el que se rige.