Es el libro que supondrá el
centro de la teoría de Weber, supondrá la salida de una de sus crisis. A su
vez, mostrará un nuevo análisis, se introducirá en una sociología comprensiva y
hablará de la relación religión – capitalismo. Es un libro sagaz de interpretaciones
muy ajustadas e imaginativas. Es una nueva interpretación, no
es un saber erudito, busca la relación entre la religión y la economía que
aparentemente no se pueden unir.
El origen del capitalismo moderno
está históricamente construido; se darán una serie de valores, creencias,
circunstancias de conocimiento y fe que dará lugar a este origen. Lo
relacionará con la forma en que se asienta una religión como el protestantismo
o el calvinismo. El núcleo de la tesis se
establece cuando Weber marce la creación de esta ética en la época post- feudal, época de transición, cuando se crean
ritos que no existían anteriormente (culto al ahorro, la profesión es una
situación de respetabilidad y vocación en la que se desarrolla nuestra idea
moderna).
Para Weber no significa que estas
familias calvinistas descubren el comercio ni la industria, sino que lo
reinventan. La burguesía aumenta su poder a través de estos dos elementos.
Elementos básicos en la religión protestante y en la forma de ver la vida
asociando economía y religión (aportación fundamental del protestantismo). La idea de desconfiar del
mercader porque lleva a conductas de usura y esclavitud, idea del precio
justo, etc., es decir, la idea principal es la de desconfiar del comercio. La idea
del precio justo estará siempre por encima del mercado, la desconfianza será el
control del mercado.
El protestantismo dará lugar a
una serie de configuraciones como:
- Vocación
profesional:
Aquello que trata de ser cada uno en la vida, su proyecto vital. La vocación
moderna no es el deseo de servir en una fórmula vital a Dios, sino una profesión,
es el honor, el estatus.
Para Weber, en el protestantismo,
la profesión se convertirá en el medio para servir a Dios. Es el protestantismo el que
construye esa idea de la profesión como centro y la ejemplaridad en su empreño
será la mejor manera de servir a Dios. En el catolicismo existe una
comunidad que pesará sobre el individuo, se crean ritos recogidos en la
liturgia como el de la confesión.
Mientras que en el protestantismo
no existen ritos por lo que la conciencia pesará, se dará una fortísima
individualización incluso en los ritos, sin imágenes, incluso es posible la
libre interpretación de los textos bíblicos. Según Weber el protestantismo
representa e individualismo radical, es decir, lo totalmente opuesto al
catolicismo. Nadie cuida de ti más que tú
mismo.
Existe un fuerte pesimismo vital,
fuerte tendencia a una vida de ahorro, muy austera y con el temor a Dios. La
conducta protestante genera una alta tasa de riqueza acumulada cuya mayor
misión es volver a acumularse. No pueden desperdiciar el tiempo, “el tiempo es
oro”, en diversión sino que deben emplearlo en trabajar para generar más
riqueza. En cambio en el mundo católico
los negocios están en contra de la moral porque sospechan de la forma en que ha
conseguido esa riqueza. Mientras que para los protestantes es la muestra del
trabajo bien hecho y el servicio a Dios. Crea el espíritu del capitalismo:
dureza moral y de comportamiento. Tipo de comportamiento que no tiene descanso
moral.
-
¿Si
no se dan valores protestantes no se da el capitalismo?
Esta idea de una glorificación
de un reforma protestante que supone un fuerte integrismo, una fuerte
disciplina personal que impregna al individuo en su propia forma de ser (no se
da la doble moral), esta reforma busca limpiar el concepto de comunidad, sólo
nos importa el individuo. El siguiente paso es el que uno pueda cambiar esa
relación con Dios por la de uno mismo. Dando lugar a la secularización, se
mantiene la relación con Dios pero se responde ante uno mismo. La
secularización supone la elección libre de la religión, no he de estar unida a
ninguna constitución. A la vez que nos vamos secularizando vamos creando una
relación más personal por lo que no se necesita el espejo de Dios para
establecer la balanza de nuestras acciones.
CRÍTICAS:
-
El
marxismo siempre lo ha criticado. Las conductas morales, religiosas… son
más bien el resultado más que la causa del capitalismo. El cambio socio-económico
como modo de producción concreto es el único que puede explicarlo, no así las
mentalidades.
El
capitalismo es un modo de producción histórico basado en la violencia por lo
que convertirlo en la ética protestante nos hará quedarnos sólo con lo
positivo.
- Es
tendencista, crea modelos y prototipos. Pueden existir casos
particulares que no cumplan ese modelo.
-
La
más actual, la posmoderna. Lo critica porque las tesis parecen un relato
en el que se eliminen las realidades que no convienen (macro relato positivo).
Es un modelo inventado, no son tan perfectos. No es exacto, es un macro relato
en el que se elimina todo lo malo.
La
teoría de la estratificación (relación clase-mercado. Clase, Estado, poder se
unen en esta estratificación) de Weber será más compleja que la del marxismo y
que la determinación económica del mismo. Cuanto
más coherente sea la relación de poder, riqueza y estatus, más estable y mejor
relación tendrá en lo social.
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